Los microservicios son tanto un estilo de arquitectura como un modo de programar software. Con los microservicios, las aplicaciones se dividen en sus elementos más pequeños e independientes entre sí. A diferencia del enfoque tradicional y monolítico de las aplicaciones, en el que todo se compila en una sola pieza, los microservicios son elementos independientes que funcionan en conjunto para llevar a cabo las mismas tareas. Cada uno de esos elementos o procesos es un microservicio. Este enfoque de desarrollo de software valora el nivel de detalle, la sencillez y la capacidad para compartir un proceso similar en varias aplicaciones. Es un elemento fundamental de la optimización del desarrollo de aplicaciones hacia un modelo nativo de la nube.
Sin embargo, el mayor interrogante es cuáles son las ventajas de utilizar una infraestructura de microservicios. En pocas palabras, el objetivo es distribuir software de calidad con mayor rapidez. Si bien esto se puede lograr con los microservicios, se deben considerar otras cuestiones. Dividir las aplicaciones en microservicios no es suficiente; es necesario administrarlos, coordinarlos y gestionar los datos que crean y modifican.
¿Para qué sirven los microservicios?
Flexibilidad Tecnológica: Los microservicios permiten utilizar diferentes tecnologías y lenguajes de programación dentro de la misma aplicación, lo que facilita la elección de la tecnología más adecuada para cada servicio específico.
Escalabilidad: Dado que cada microservicio es independiente, pueden escalarse de forma individual según sea necesario, sin tener que escalar toda la aplicación. Esto es particularmente útil para manejar cargas de trabajo variables.
Despliegue Independiente: Los microservicios pueden desplegarse de forma independiente, lo que permite actualizar, añadir o reparar funcionalidades específicas de la aplicación sin afectar a otros servicios. Esto agiliza el proceso de despliegue y minimiza los riesgos asociados a las actualizaciones.
Beneficios de elegir Red Hat para los microservicios
Plataforma de Contenedores Integrada: Red Hat OpenShift es una plataforma de contenedores de Kubernetes que simplifica el desarrollo, despliegue y escalado de aplicaciones basadas en microservicios. Ofrece un entorno de desarrollo consistente y automatizado que facilita el ciclo de vida completo de las aplicaciones.
Ecosistema de Código Abierto: Al basarse en soluciones de código abierto, Red Hat permite a las organizaciones beneficiarse de la innovación colaborativa y la flexibilidad que caracteriza al código abierto, al tiempo que proporciona la seguridad y el soporte necesarios para entornos empresariales.
Seguridad y Confiabilidad: Red Hat ofrece soluciones con un enfoque fuerte en seguridad, integrando políticas y herramientas que ayudan a proteger las aplicaciones y la infraestructura subyacente. Además, Red Hat Enterprise Linux (RHEL) proporciona una base sólida y segura para desplegar microservicios.
Automatización y Gestión: Herramientas como Ansible by Red Hat facilitan la automatización de despliegues, configuraciones y operaciones, lo que es crucial para gestionar eficientemente las complejidades de una arquitectura de microservicios.
Interoperabilidad y Estándares: Las soluciones de Red Hat están diseñadas para ser interoperables, lo que permite a las organizaciones integrar sus aplicaciones de microservicios con sistemas y software existentes, evitando el bloqueo por proveedor.
Soporte Empresarial: Red Hat proporciona soporte empresarial, asesoramiento y capacitación, lo que puede ser invaluable para las organizaciones en su camino hacia la adopción de microservicios. Este soporte ayuda a mitigar riesgos y acelerar la implementación.
Innovación Continua: Al ser parte del ecosistema de Red Hat, las organizaciones tienen acceso a las últimas innovaciones en tecnologías de contenedores, orquestación, microservicios y computación en la nube.